Pasan los años y las históricas costumbres se mantienen: la Universidad de Chile se quedó con el Clásico Universitario por 2 a 1.
Pese a ello, en el primer tiempo fue para el olvido para la única universidad grande, entregándole el protagonismo al rival y permitiendo un gol a los 40´.
Así, en la primera etapa el Bulla no consiguió tener el balón y perdió completamente la compostura, sin tener, siquiera aproximaciones al área rival.
Sin embargo, el segundo tiempo fue totalmente distinto, ya que gracias al ingreso de Lucas Assadi y a modificaciones de Gustavo Álvarez la U recuperó el juego.
De esta manera, el Romántico Viajero comenzó a atacar más y consiguió la igualdad tras un cabezazo en el palo de Cristian Palacios y la aparición de Charles Aránguiz, quien de cabeza empató el partido.
Con este gran empujón anímico, la U siguió atacando y tras un buen tiro libre de Matías Sepúlveda, Matías Zaldivia clavó el balón, para adelantar a los Azules.
Ya sobre el final, los dirigidos por Gustavo Álvarez supieron resistir y se quedaron con un gran triunfo que nos permite seguir soñando con el título.