Rodrigo “Tucu” Contreras volvió a anotar por la Universidad de Chile frente a Palestino, luego de que convirtiera de penal ante La Serena el encuentro anterior.
Y en medio de este buen momento del delantero, La Magia Azul pudo conversar con parte de su familia que lo visitó en el Municipal de La Cisterna.
“Muy impresionante, cuando entró nomás ya empezamos a rezar, decíamos que se tiene que dar el gol, así que estábamos todos entusiasmados y con las ganas que convierta el gol”, señaló Nahuel Contreras, el hermano del azul.
De igual manera, confesó que en la jugada del gol del trasandino “cuando lo vi me hace acordar cuando era chiquito y arrancaba un toro y no lo podía parar nadie, así que ya cuando lo vi le dije, ahí viene el gol mamá, así que quedé tranquilo y fue gol”.
Por su parte, Andrea, señaló que “la verdad que me emociona muchísimo cada vez que lo veo lloro, porque yo siempre le digo que solo Dios, él y yo sabemos todo el sufrimiento que tuvimos, es una emoción inmensa”.
“Yo cuando lo veo, lo único que hago es mirar al cielo y le digo a Dios que lo ayude, que lo proteja y que le dé fortaleza cada día. De verdad. Porque él desde que tenía 11 años luchó solito en una cancha y ahí está él. La verdad que la peleó duro, como dicen en Argentina”, agregó.
El sueño de llegar a la U
De igual manera, el hermano del Tucu confesó su gran fanatismo por la Universidad de Chile desde antes de arribar al Romántico Viajero.
“En Antofagasta ya le gustaba la U. En un partido salió de la cancha y estábamos hablando y me dice: la verdad es impresionante la gente de la U, soñaba con jugar acá. Cuando estaba en Buenos Aires, me dijo que lo llamaron de la U y le dije que si se acodaba cuando estaba en Antofagasta y quería jugar por la U. Hizo todas las fuerzas para llegar al club y gracias a Dios se dio”, reveló.
Siguiendo esta línea, apuntó a que “cuando se concretó todo era una felicidad entre los dos, nos abrazamos y más que contentos. Está donde quiso estar hace muchos años”.
